Tras la épica victoria en Coín
el sábado anterior, el Villacarrillo CF Aceite Puerta de Las Villas volvió a
vencer, esta vez en casa frente al C.D. Churriana.
Buena tarde en un municipal de
Veracruz que registró la enésima gran entrada de la temporada, con una afición
enganchada al sueño del ascenso a Tercera División. La machada de la pasada
jornada había que consolidarla este domingo frente a un rival de la zona media
de la tabla. Además, existía incluso la posibilidad de alcanzar el liderato si
se ganaba y empataban por otro lado el Linares y el San Andrés en su duelo fratricida.

El Churriana no ofrecía nada
de fútbol, pero se hallaba cómodo en el césped ante un rival timorato en
ataque. Les bastaba una correcta disposición en el campo para frenar las
contadas combinaciones locales. Los minutos se sucedían y el peligro en ambas
áreas era nulo. Tan sólo un fallo defensivo malagueño supuso una clara ocasión
para los nuestros, pero Toni no aprovechó el regalo y envió desviado su
lanzamiento ante la apresurada salida del cancerbero visitante Marcos. Aparte
de la oportunidad citada, habría que reseñar dos cabezazos sin éxito de Ortega
tras sendos centros de Montiel y Toni. Con este paupérrimo bagaje se llegaría
al descanso.
Ya en la reanudación, el
panorama cambió radicalmente. El Villacarrillo saltó al terreno de juego
decidido, sin rodeos, directo a la yugular de su rival. Lasarte acertó en los
cambios, dando entrada a Antonio Martos en la medular y desplazando a Juan
Ángel a la izquierda. A los cuatro minutos de esta segunda parte, Ortega estuvo
a punto de abrir el marcador tras un centro de Maykel, pero su testarazo lo
desbarató prodigiosamente el arquero malagueño. No obstante, al minuto
siguiente el delantero celeste se desquitaría con una sublime acción al borde
del área, en la cual arrastró a varios zagueros visitantes y finalizó con un
perfecto envío a la banda de Montiel, quien libre de marca, fusiló con un derechazo
cruzado a Marcos.
El fútbol es un estado de ánimo, que diría Jorge Valdano. El 1-0 no
relajó ni un ápice a los locales, que inmersos en una inercia positiva,
siguieron a la carga para intentar ampliar el marcador. Antonio Martos casi
logra un golazo desde fuera del área, pero su lejano lanzamiento acabó en
córner. Dicho saque de esquina fue botado por Maykel al segundo palo, y Salva,
trágicamente solo para los intereses malagueños, alojó de cabeza el cuero al
fondo de las mallas.
En un cuarto de hora se había
liquidado prácticamente el encuentro. Tiempo pues para jugar sin tanta presión,
para gustarse; para interesarse por lo ocurrido en Linarejos o para pensar a
qué país te vas a ir a trabajar. El Churriana apenas transitaba con el balón en
campo contrario, y el partido estaba visto para sentencia. La placidez con la
que la afición local contemplaba el encuentro sólo se vio alterada por la
inexplicable decisión del trencilla al no señalar un clamoroso penalty a Ortega,
por mor de un atropello sufrido por éste cuando había controlado en el área un
balón con el pecho. Que no se sancionara ésta acción con la pena máxima es un enigma
equiparable al del asesinato de JFK o
al de las Caras de Bélmez.
De ahí al final, poco más. Deberes
hechos y ascenso a la segunda plaza, gracias al triunfo del Linares. Los cuatro
primeros de la clasificación en un pañuelo, en 3 puntos. ¿Quién da más? El próximo
domingo toca derby, en Baeza. Será una de las ocho finales que quedan…
2 comentarios:
vamos campeones que los malagueños no podrán con nosotros!!
arribaaa , arriba arribaaaa!!arriba con ese balooooonn!! que elady la prepara que elady la prepara y ortega remata a goool!!
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